A veces, las cosas más simples son las mejores...
Cuando se planea una boda, una puede perderse en los detalles. Hay tantas opcionesy tantos servicios, basta ver las revistas de bodas, pero esto puede complicarnos más la vida, que ayudarnos...
Lo que conviene al planear una boda, es definir desde el principio un concepto alrededor del cual gire el evento. Se trata de armonizar todos los elementos de la boda, puedes escoger un color, un tema, un lugar geográfico, un toque cultural...
El cielo es el límite, pero algo debes tener en cuenta... MANTÉN LAS COSAS SIMPLES.
Siempre es mejor que el concepto este en pequeños detalles; elige conceptos que sean fáciles de transmitir y sobre todo de ejecutar, se trata de hacer algo diferente sin que signifique alterar nuestro presupuesto... ser diferente, no quiere decir complicado, ni recargado.
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